Cae el amor como triángulo.
Cae el amor a los ojos,
cae sin parar, sin pensar.
Sin preguntar.
Sólo él sabe caer de pie
y dejar en el alma
dos o tres destinos cruzados.
sólo él sabe de estos
tránsitos,
de este camino inverosímil,
tirado de arrojo
a ciertas manos consecuentes
y sabias.